Una crisis alimentaria amenaza Burkina Faso
En Burkina Faso
Un 80 % de la población de Burkina Faso vive de la agricultura. Es decir, se alimentan de lo que ellos mismos cultivan. Para regar utilizan el agua de la lluvia. La época de lluvias, que se llama “hivernage”, va de junio a septiembre.
Así, en junio se plantan las semillas, normalmente de sorgo blanco y mijo, y en octubre hacen la recolección. Durante estos meses todo el mundo trabaja en los campos: hombres, mujeres, jóvenes, niños y niñas. El alimento se guarda en los graneros, y tiene que durar hasta la recolección del año siguiente. Es pura economía de subsistencia. Si tienen agua cerca, hacen un pequeño huerto. Si tienen unas cuantas gallinas obtienen algún huevo de vez en cuando.
Carencia de lluvias en verano del 2017, hambre en verano del 2018.
Durante el verano de 2017 llovió poco en algunas zonas de Burkina, por lo que ocasionó una recolección de grano más reducida. Se calcula que hubo un déficit de 72.600 toneladas, exponiendo al hambre a tres millones de personas, que ya no tienen prácticamente nada para comer en estos momentos. Viven en 17 de las 45 provincias del país.
El gobierno de Burkina hace lo que puede, pero no llega para satisfacer todas las necesidades.
Aigua para el Sahel
Agua para el Sahel es una organización para el desarrollo y para la justicia global. Nada que ver con las ONGs humanitarias.
Pero…En julio, un voluntario de agua para el Sahel irá a Burkina a ver los forages y las rehabilitaciones que acabamos de hacer, así como para recibir nuevas propuestas, aunque ya tenemos una larga lista.
Irá a algunos de los pueblos que, cómo Kiou (provincia de Passore, muy afectada), ya están sufriendo inseguridad alimentaria. Ahora, por fin tienen agua potable, sí, pero ¿de que les servirá si no tienen nada para alimentarse? ¿Cómo podemos presentarnos allá sin aligerar un poco la situación?
¡Esperamos vuestra ayuda!